De vuelta con ustedes en este mundo maravilloso de los sueños, hoy precisamente viene a mi mente un tema volador y soñador.Verán… me he puesto a pensar cuantas veces al día trabaja mi cerebro creando e imaginándose maravillosas ideas y que estas ideas tan fantásticas (para mi), vuelan y vuelan revoloteando mi pensamiento como pronunciando permanentemente mi nombre.
Cualquier parecido con la realidad en el ejemplo anterior es pura coincidencia... Si lograste conectarte con esta situación aunque no haya sido tu caso, entonces sueña conmigo y embarquémonos juntos en esta nueva travesía.
Secreto sumarial. No eres el único (a) al que le ha ocurrido y tampoco el ultimo (a) que ha tomado cartas en el asunto para hacer de esas locas, extrañas, traviesas, grandiosas y fantásticas ideas soñadoras, una realidad fabulosa para su vida.
Recuerdas la sensación fastuosa de esas 5 ideas?
Recuerdas que sabor dejo en tu boca?
Que aroma tenían?
Como las visualizaste?
Que te dijeron?
Como las sentistes?
Grandioso verdad?, que con solo recordarlas se pueda volver a percibir todas estas sensaciones que te describí.
Sin embargo y a pesar que estoy segura que tú recordaste tus 5 últimas grandiosas ideas, hay gente muy diferente a ti que no las pudo recordar, no se quienes pero habrán unos que otros por allí.
Sabes porque no pudieron recordarlas? Porque solo revolotearon su cabeza solo eso, las ideas estuvieron de visita, pero no fueron atendidas así que suassssssss se fueron y no dejaron ni rastro alguno de su visita, solo se percibe levemente que allí estuvieron, que hacían por allí? Quien sabe…
Lo cierto es que seguimos escuchando que a otros les pasan grandes cosas pero a mi no, otros son ingeniosos pero yo no, otros tienen grandes proyectos pero a mi no me toco esa suerte. Y en ese momento cuando volteo a ver a esas personas, para mi sorpresa observo un umbral de pájaros revoloteando su cabeza.
Como es entonces que observamos tantos pajarillos revoloteando sin ser cazados (en sentido metafórico claro…) para amarlos, cuidarlos, alimentarlos y crecer con ellos. Sencillo, los dejamos escapar por miedo a no tener tiempo para cuidarlos, por no sentirnos lo suficiente amables para amarlos, por no tener el dinero suficiente para alimentarlos y por considerar que todavía nos faltan algunas cosas por hacer, como para crecer permanentemente con el mismo pajarillo.
Ves? Esto pasa… que no te sorprenda, porque esto pasa…
No todo esta perdido para las pajareras!!!. Llega el día en que ya no caben tantos pilluelos juntos, así que un día se decide por tomar cada idea que transita por tu mente atendiéndola de inmediato con lápiz y papel, es decir, plasmándola en una realidad mas cercana, al plasmarla ya no se ira tan rápido de la cabeza como cuando no lo hacías, si lo haces comenzaras a olerla y saborearla y si te gusta lograras escucharla y visualizarla para luego sentirla en carne propia. La única manera que se te escape es que no la quieras contigo o la guardes hasta nuevo aviso, cosa que creo no harás cuando te cerciores que te gusta. Pongámoslo así “A mi, particularmente me encanta el helado y te aseguro que porque me gusta me lo como y hasta lo comparto con aquellos que también les gusta y no dejo que se derrita porque si no ya no seria lo mismo, por lo menos para mi”.
Hasta el próximo sueño
